Kintsugi-kit

Diseño y Uso

El primer kit de reparación DIY original 'New Kintsugi' (desde 2009) es fácil de usar para reparar cerámica rota con oro. Abraza la belleza de la imperfección, inspirada en el antiguo arte japonés del Kintsugi, o reparación con oro.

Qué Hay en el Kit

• 25g de pegamento de dos componentes
• 10g de masilla para rellenar piezas faltantes
• 4g de polvo de oro o plata
• Brocha de madera
• Palillos de bambú
• Guantes
• Un manual paso a paso (EN, NL, FR, GE, IT, SP, PT, HU) con imágenes detalladas

Información Práctica

• Un nuevo kit de reparación Kintsugi se puede usar varias veces para reparar hasta 10 artículos
• El kit se puede usar en casi cualquier otro material, como vidrio, madera, mármol o plásticos duros
• Asegúrese de leer el manual antes de usar
• Deje secar 48 horas para que el pegamento se cure completamente antes de usar el artículo reparado

Filosofía del Kintsugi

El Kintsugi es un arte japonés donde la cerámica rota se restaura con amor y oro. La filosofía detrás de esto es resaltar las fracturas en lugar de ocultarlas. También puedes aplicar Kintsugi a tu vida. Muestra que las cicatrices emocionales pueden dar a tu existencia un brillo dorado.
Aunque algunas personas parecen navegar sin problemas por la vida, la mayoría de nosotros experimentamos fracturas y heridas emocionales. En Occidente, a menudo intentamos ocultar el proceso de curación, pero en Japón, las personas cubren metafóricamente sus heridas con oro. La idea de enfatizar las grietas y fracturas proviene del Kintsugi.

La palabra Kintsugi proviene del japonés 'kin' (oro) y 'tsugi' (unir), que significa literalmente 'unión dorada.' El Kintsugi es una hermosa metáfora de tu proceso de curación. Así como el Kintsugi eleva los objetos rotos al resaltar sus cicatrices, puedes aprender a aceptar tus imperfecciones como parte de ti. Tu doloroso pasado te hace único. Llévalo con orgullo.

Fragmentos Emocionales

El Kintsugi no es una solución rápida. Reparar fracturas emocionales con oro requiere paciencia. Ve tu herida como un punto de partida para el desarrollo, un proceso en el que lentamente la transformas en oro. Este proceso consta de seis fases, detalladas en el libro "Kintsugi, la Belleza de las Cicatrices Emocionales" de Céline Santini. El libro ofrece consejos y ejercicios para empezar de inmediato.